Sinopsis:
Bajo una antigua mansión de Pablo Escobar en la costa de
Miami se ocultan veinticinco millones de dólares en oro. Un grupo de hombres
sin escrúpulos lleva años buscándolos. Su líder es Hans-Peter Schneider, quien,
impulsado por inconfesables apetitos, se gana la vida haciendo realidad las
violentas fantasías de ricos y poderosos. Cari Mora escapó de la violencia de
su Colombia natal y el cuidado de la mansión es ahora uno de sus variados
trabajos. En cuanto pone sus ojos en Cari, Hans-Peter se encapricha de ella.
Pero Cari Mora es una superviviente. Y no es la primera vez que tiene que
luchar para demostrarlo.
Reseña:
Tenía bastantes expectativas con la lectura de este libro,
que viene precedido de una buena campaña de promoción y que como punto fuerte
es que su autor es el mismo que El silencio de los corderos, pero conforme
avanzaba en su lectura la decepción ha ido siendo cada vez más grande, hasta tal
punto que tenía enormes ganas de acabarlo, pero para pasar a otra cosa.
Una historia que
promete grandes dosis de misterio, suspense, y violencia, al menos leyendo
la sinopsis, con unos personajes fuertes y carismáticos, pero al final queda en una historia que presenta bajo mi punto de
vista muchas carencias en cuanto a la
estructura de la novela y sobre todo en unos personajes que no llegan a
formar parte de la misma. Todos ellos, hasta la pareja de principales, Cari
Mora y Hans-Peter, se mueven por estas páginas sin llegar realmente a tocar la
fibra del lector. El personaje de Cari Mora, una mujer que viene de sufrir lo más
terrible en su reclutamiento forzoso con las FARC de Colombia, se desdibuja en
su nueva etapa en Miami como cuidadora de la casa de Pablo Escobar y ni
siquiera llega a ser ese personaje fuerte y carismático que promete la
sinopsis.
La trama poco a poco se desvanece y se aleja un poco de la
primera línea argumental que es la de encontrar el oro que supuestamente
Escobar escondió en esta mansión, y se centra en pasear a unos personajes poco
dibujados con los que en ningún caso se llega a empatizar, de manera un tanto
desordenada y caótica.
En cuanto a la manera de narrar hay frases que no sabes si
son una tomadura de pelo o es que no he llegado a entender el humor de este
hombre, como esta muestra: “Tras hacer un cálculo con un lápiz pequeño” o esta en la que se pone en la mente de un
cocodrilo y entre otras cosas escribe: “sintió
un mareo (el cocodrilo) como una
hora después de habérselo comido”. O una historia de caracoles que no lo
son tanto traída no se sabe muy bien a cuento de qué. Mucha paja que no lleva a
ninguna parte y que lejos de aportar lo que hace es desmerecer una novela que
ha querido tratar varios temas en su concepción, como la inmigración, la
violencia, el tráfico de órganos o la
lealtad y que se desvanece en una historia lineal, sin grandes misterios, sin
giros argumentales y sin personajes que se luzcan.
El autor:
Thomas Harris nació en la localidad
estadounidense de Jackson, Mississippi, el 11 de abril de 1940. Se
licenció en lengua inglesa en la Universidad de Baylor de Waco, Texas. Empezó
su andadura profesional trabajando en el Waco Tribune Herald donde cubría los
temas policiales. Desde 1968 trabajó para Associated Press. Estuvo brevemente
casado durante su juventud, matrimonio fruto del cual tiene una hija, pero
desde entonces ha convivido con su pareja de toda la vida, Pace Barnes.
En su época universitaria publicó sus primeros relatos, en
publicaciones como Argosy o True. Su primera novela, inspirada en un ataque
terrorista real (el atentado de los Juegos Olímpicos de Munich donde once
atletas israelíes fueron asesinados en el año 1972), fue Domingo negro,
si bien en esta novela el ataque se planeaba sobre la SuperBowl de la NFL
estadounidense.
Se le conoce sobre todo por su serie de novelas centradas en
el personaje de Hannibal Lecter, que ha inspirado varias películas de
Hollywood (El silencio de los corderos, Hannibal, Hannibal:
El origen del mal y El Dragón rojo).
Pues creo que voy a seguir sin leerlo...y se queda en la montaña de pendientes de momento. Jajaja
ResponderEliminarA mi no me ha gustado nada, y mira que no soy muy exigente con las lecturas. Ya me contarás si lo lees.
EliminarHola.
ResponderEliminarNo conocía el libro y por el momento no creo que lo lea, tengo demasiados pendientes, pero gracias por la reseña.
Por cierto, acabo de encontrar tu blog y me quedo por aquí. Te invito a pasarte por el mio.
Nos leemos.
Tenía curiosidad, pero no creo que me lo lea ahora mismo. No conocía tu blog, me quedo de seguidora y te invito a que te pases por el mío (es Relatos y Más, es que en el perfil salen dos).
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.