Lágrimas de ceniza, de Rubén Aído Cherbuy

 Sinopsis:

Lágrimas de ceniza presenta un viaje al pasado con unos personajes atormentados por un horrible crimen. Tanto para Jason como para la pequeña localidad de Thornwick, el hallazgo del cuerpo del sanguinario asesino tras casi dos décadas supone remover profundas heridas silenciadas por el tiempo, secretos oprimidos y respuestas perdidas. 

Descubre un mosaico de relaciones humanas marcadas por la tragedia donde la angustia, el rencor, la esperanza y las bajas pasiones ofrecen al lector las oscuras motivaciones de unos personajes tan impredecibles como fascinantes.  

El estigma de la familia Chapman permanecerá latente hasta que caiga el último de ellos, solo así descansarán los habitantes de Thornwick. 

Reseña:

El pequeño pueblo de Thormwich se verá sacudido por una tragedia de la que el lector conocerá casi todos los interrogantes: quien, cómo, cuándo y dónde, pero nos falta el por qué. Quizás esa sea la cuestión más importante de todas las investigaciones una vez conocido el quién.

El autor sitúa la trama en una localidad ficticia en la que los personajes se mueven en un arco hermético dentro de la comunidad, anclados en sus costumbres y con la convicción de que solo ellos son dueños de sus éxitos y sus fracasos.

Durante la primera mitad de la novela el autor consigue asentar en el lector un desasosiego propio de las novelas de intriga y misterio y es ya en la segunda mitad cuando la acción se vuelve más ágil a la vez que se van poniendo boca arriba las cartas que estos personajes están jugando para desvelar una partida que nunca se terminó.

Lágrimas de ceniza contiene una historia de venganza, de reconciliación con el pasado y de silencios, con los que el personaje principal tendrá que lidiar para descubrir toda la verdad de cuanto sucedió aquella noche en la que su hermano gemelo perpetró una tragedia que aún sigue generando mucho dolor.

Los personajes que crea Rubén Aído no se conforman con estar bien trazados sino que además lo hacen de manera totalmente certera, con sus sombras y sus luces, sus imperfecciones, sus miedos y sus aciertos, algo que se agradece entre tantas novelas donde la mayoría de los personajes secundarios no ofrecen nada más allá de su mera presencia en situaciones específicas. Aquí podrás empatizar o no con alguno, otros te crearán desazón cada vez que aparecen, pero nunca te dejarán indiferente.

La trama, oscura y misteriosa a partes iguales está contada en dos líneas temporales aunque no muy distantes entre sí. De un lado la actualidad en los años 90 en la que Jason busca respuestas y la otra en la que sucedieron los hechos en los años 80.

Lágrimas de ceniza aborda sin tapujos temas como la familia y las relaciones entre sus miembros, la religión, mal entendida por supuesto, la aceptación del otro como norma esencial de convivencia y otros tan universales como el dolor, la culpa o la muerte como final sanador de todos los males.

Un libro rápido y ágil de leer gracias al formato de capítulos relativamente cortos y esa narrativa casi cinematográfica que el autor imprime creando un interés creciente donde el misterio está asegurado en cada página.

Lágrimas de ceniza

El autor:

Vocacional, inquieto y apasionado son algunos de los calificativos que mejor representan el recorrido profesional de Rubén Aído Cherbuy (Cádiz, 1990). Su atracción por las artes se materializó desde la infancia en la escritura, donde daba rienda suelta a su imaginación. Ya en la adolescencia se interesó por el cine negro y el suspense, lanzándose a la autopublicación con Mañana puede ser un gran día (2013), su billete para entrar en el mundo editorial. Después vendrían Recuerda (2014), Rododendro (2016) y Lágrimas de ceniza (2022)

Apasionado del cine y los videojuegos, se mantiene al día sobre la actualidad de esos mundos y colabora habitualmente como redactor en diferentes webs temáticas

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